Sigo peleando con mi tapa y parece que, después de varios intentos y de pruebas en los recortes de la misma tapa , llego a la conclusión de que la madera está demasiado seca y por eso absobe demasiado y de manera irregular.

Pienso en hidratarla con agua y una esponja muy escurrida. Parece que lo agradece, y en seguida le he dado con un tapaporos al agua que tenía por mi taller.

La primera impresión es buena.

Veremos...

...

Ya en casa de Juan, saca el barniz que nos propuso. Le preguntamos dónde comprarlo para no gastar el suyo, pero insiste en que le queda media botella (cunde mucho) y que él no la va a usar.

Este barniz es muy brillante "charol", y la idea que teníamos era barnizar tirando a mate o muy poco satinado. Le pongo de ejemplo su guitarra experimental, de la que ya hamos hablado, y dice que ese no es el acabado final, que la tiene a medio.

Ante nuestra insistencia, como es habitual en él, nos dice: "vosotros veréis". Y los tres recordamos entre risas su frase lapidaria: "Total, pa quien es..."

Nos dice que eso se puede conseguir al final usando lana de acero muy fina, del 0000.

He traído una botella de alcohol, recordando que nos dijo que con este tipo de barniz se gasta mucho.

Ahora toca dar tapaporos nitro al cuerpo y al mástil de mi guitarro. A diferencia de la tapa, el palosanto queda bastante parejo, a pesar de usar brocha.

Los colores que van saliendo son preciosos

Vicente plantea, antes de barnizar, cómo arreglar un comido que tiene un aro de su guitarro. Parece que cuando se curvó se hizo un pequeño socavón y, al lijarlo se nota mucho.

Juan, como siempre, tiene soluciones para todo y saca un superglue que dice que quedará bien

En principio canta un poco, bastante, pero confiamos en Juan.

¡Faltaría más!

Le toca el turno al puente de Vicente.

Confirmamos lo que hay que hacer, y empieza a desbastar lo más gordo con la sierra de cinta.

Con cuatro cortecicos de ná, ya parece un puente

Vicente se relame de gusto, pero esto no ha hecho más que empezar.

He traído la herramienta estrella de mi taller: mi sierra de marquetería y el soporte.

Vicente empieza a usarla con destreza.

Además, he traído las escuadras 3D que pedí en Aliexprés para Vicente y para un servidor. La mía se la regalé a Juan.