EL
PELÍCANO

A
pesar de que le falta la cabeza, probablemente perdida en la
explosión, hay bastante consenso en que se trata de un pelícano
sobre una especie de nido. El error de Fuentes y Ponte, que
interpreta esto con un águila, le viene bien para comparar con
la Casa de Austria, que se supone que reinaba en la tierra como
el águila en el cielo.
Suponiendo,
como parece ser, que se trata de un pelícano, tiene mayor sentido,
aunque también se alimenta la iconografía de un error. Resumiendo:
Se
creía que el pelícano alimenta a sus polluelos con su propia
sangre, en caso de necesidad, golpeándose el buche y arrancándose
las plumas hasta sangrar. Perfecto para acompañar a la Caridad.
Incluso
se decía que con su sangre podía resucitar a sus polluelos tres
días después de haber muerto de hambre (resurrección, eucaristía...)
En
realidad, los pelícanos guardan en la bolsa de su pico la comida
que pescan o recolectan, y se golpean el buche para expulsarla,
lo que puede producir el error.
Todavía
podemos encontrar esas afirmaciones con frecuencia:
"Así
como el pelícano da su vida por sus crías, hiriéndose en su
propio pecho, Cristo da la vida por nosotros para que podamos
tener vida eterna; Nuestra alma no puede vivir sin el alimento
de la EUCARISTÍA."
https://blog.granda.com/2016/03/12/el-pelicano-en-la-iconografia-cristiana/
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