En la web
del Museo de la Ciudad hacen un resumen:
Los pósitos
murcianos
El primer
pósito de grano de Murcia, ya como ciudad castellana, se asentó
en el edificio que prestaba ese mismo servicio en la Murcia
andalusí, según el privilegio otorgado por Alfonso X el Sabio
en 1272. Dicho pósito se encontraba junto a la actual parroquia
de San Lorenzo, aunque poco después fue cedido a la Diócesis
para almacenar los diezmos de las parroquias murcianas. La huella
de aquel edificio quedó en el callejero, pues la calle en la
que se encontraba se llama hoy 'del Granero' (conecta la popular
calle de Correos y la plaza de abastos de Saavedra Fajardo).
Tras una
ubicación distinta, en el siglo XIV el pósito se instaló en
la plaza de San Julián, al final de la calle de San Pedro. En
cualquier caso, tal y como apunta Carbonell Arroyo, es posible
que hubiera otros depósitos de grano 'secundarios' o más pequeños
en diferentes puntos de la ciudad.
En la plaza
de San Julián permaneció el pósito principal, aunque no por
mucho tiempo: en 1555, tras considerarlo la mejor opción, el
Concejo decidió trasladar el Matadero al otro lado del río y
emplear su solar, en el hoy llamado Plano de San Francisco (entonces
'Carretería'), para la construcción de un nuevo edificio que
serviría como pósito, almudí y peso de la harina.
La nueva
construcción, de dos plantas, se levantó así en la misma ubicación
que ocupa el actual edificio, según las trazas del maestro albañil
Esteban Fernández, y en 1576 se añadió a su fachada el relieve
de la Matrona o Alegoría de la Caridad, esculpido por Hernando
de Torquemada con ayuda de los oficiales Bartolomé Fernández
y Lorenzo de Zaajosa.
Sin embargo,
como relata Torres Fontes, el 30 de agosto de 1612 a las dos
de la madrugada, en mitad de una fuerte tormenta eléctrica,
un rayo descargó sobre la segunda planta del inmueble, en el
que se almacenaban provisionalmente arcabuces y pólvora, y ocasionó
un terrible incendio que dejó el edificio en un estado semi
ruinoso. Nos lo relata Carbonell Arroyo: "Aunque el Almudí
no se destruyó por completo, los desperfectos debieron ser de
tanta consideración, que se optó por derribar lo que quedó y
reconstuirlo por completo, además de ampliarlo".
Para la
nueva obra del siglo XVII, acabada en 1628 (a la vez que el
Contraste de la Seda) se diseñó un acceso más monumental que
el anterior, ejecutado enteramente con sillería y rematado con
un gran escudo de España. A ambos lados, sobre frontones partidos,
se colocó el blasón de la ciudad con las seis coronas que lo
formaban por entonces, y a la izquierda de la portada se volvió
a ubicar el relieve de la Matrona.
Más tarde,
en el siglo XVIII, se añadieron soportales de piedra a ambos
lados de la puerta principal del Almudí con cinco arcos de medio
punto cada uno, pero lamentablemente y debido a su mal estado,
fueron demolidos un siglo después. Queda testimonio de ellos
en algunas fotografías antiguas del Plano de San Francisco.
https://museodelaciudad.murcia.es/DocumentoSimple.aspx?m=8&url=%C2%BFSab%C3%ADas+que...Matrona
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