M

b

17.- FRANCISCO DE GOYA

LOS TOROS DE BURDEOS

En primer término, un toro hinca sus cuernos a una víctima, mientras pisotea a otro aficionado ya caído. Los que acuden al quite no sienten en modo alguno ni la compasión ni la tragedia, sino que sonríen estúpida y grotescamente, como una carnavalada trágica, borrachos de vino o de barbarie.

José María de Cossío.